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¿FALTA DE IMPARCIALIDAD
POR PARTE DE LA DNDA?
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¿FALTA DE IMPARCIALIDAD
POR PARTE DE LA DNDA?
DENUNCIA
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¡Justicia en Peligro! Revelando la Verdad detrás de la Dirección Nacional del Derecho de Autor
En Colombia, la música es parte integral de la experiencia comercial. Desde cafeterías acogedoras hasta vibrantes discotecas y gigantescas salas donde se realizan espectáculos públicos con la participación de artistas en vivo, la música, contribuye a crear un ambiente agradable para clientes y empleados por igual a través de las obras musicales que se comunican al público en esos comercios.
Esas obras musicales tienen unos dueños o titulares, que no son otros que los autores, compositores e intérpretes de las mismas e inclusive, quienes adquieren por vía de cesión esa propiedad intelectual; personas que a través de su creatividad enaltecen nuestra cultura y generan esparcimiento en general. Son dueños de lo que se denomina Derechos de Autor y Derechos Conexos, que no es otra cosa que la posibilidad de recibir una remuneración por la explotación o comunicación pública de esa obra o interpretación.
Para asegurar la protección integral de los Derechos de Autores e Intérpretes, la ley creó la Dirección Nacional del Derecho de Autor (DNDA), entidad pública adscrita al Ministerio del Interior, entre cuyas funciones está la de garantizar esa protección a través de la inspección, vigilancia y control de Sayco y Acinpro, Egeda, asociaciones de autores, intérpretes y productores, que tradicionalmente han recaudado los derechos de esas personas a lo largo de cuarenta y dos años.
Sin embargo, en los últimos tiempos han surgido inquietudes acerca del verdadero rol que desempeña la DNDA en la protección de los Derechos de Autor. Sorprendentemente, en lugar de salvaguardar los derechos de autores e intérpretes, se plantea que está siendo utilizada para favorecer intereses económicos que supuestamente debería vigilar, inspeccionar y controlar.
Nos preocupa profundamente la imparcialidad con que ejerza sus funciones la DNDA, como que creemos firmemente en que las funciones públicas , deben ser ejercidas de manera justa y transparente para proteger los derechos de todos los titulares de derechos de autor y derechos conexos del país y no, para que la función pública se ponga al servicio de unos intereses privados, que muchas veces están en contra de los autores, compositores e intérpretes de las obras musicales.
Por eso, estamos levantando la voz para denunciar estas supuestas irregularidades y conflictos de interés.
Queremos que todos los estamentos del país estén plenamente informados sobre esta situación y se unan a nosotros en nuestra lucha por el ejercicio transparente de la función pública encomendada a la DNDA.
¡Justicia en Peligro! Revelando la Verdad
Detrás de la Dirección Nacional del Derecho de Autor
En Colombia, la música es parte integral de la experiencia comercial. Desde cafeterías acogedoras hasta vibrantes discotecas y gigantescas salas donde se realizan espectáculos públicos con la participación de artistas en vivo, la música, contribuye a crear un ambiente agradable para clientes y empleados por igual a través de las obras musicales que se comunican al público en esos comercios.
Esas obras musicales tienen unos dueños o titulares, que no son otros que los autores, compositores e intérpretes de las mismas e inclusive, quienes adquieren por vía de cesión esa propiedad intelectual; personas que a través de su creatividad enaltecen nuestra cultura y generan esparcimiento en general. Son dueños de lo que se denomina Derechos de Autor y Derechos Conexos, que no es otra cosa que la posibilidad de recibir una remuneración por la explotación o comunicación pública de esa obra o interpretación.
Para asegurar la protección integral de los Derechos de Autores e Intérpretes, la ley creó la Dirección Nacional del Derecho de Autor (DNDA), entidad pública adscrita al Ministerio del Interior, entre cuyas funciones está la de garantizar esa protección a través de la inspección, vigilancia y control de Sayco y Acinpro, Egeda, asociaciones de autores, intérpretes y productores, que tradicionalmente han recaudado los derechos de esas personas a lo largo de cuarenta y dos años.
Sin embargo, últimamente, han surgido preocupaciones sobre el verdadero papel que ejerce la DNDA en la protección de los Derechos de Autor, pues sorprendentemente, porque supuestamente está siendo utilizada, no para proteger realmente esos derechos de autores e intérpretes, sino para favorecer a los intereses económicos que supuestamente vigila, inspecciona y controla.
Nos preocupa profundamente la imparcialidad con que ejerza sus funciones la DNDA, como que creemos firmemente en que las funciones públicas , deben ser ejercidas de manera justa y transparente para proteger los derechos de todos los titulares de derechos de autor y derechos conexos del país y no, para que la función pública se ponga al servicio de unos intereses privados, que muchas veces están en contra de los autores, compositores e intérpretes de las obras musicales.
Por eso, estamos levantando la voz para denunciar estas supuestas irregularidades y conflictos de interés.
Queremos que todos los estamentos del país estén plenamente informados sobre esta situación y se unan a nosotros en nuestra lucha por el ejercicio transparente de la función pública encomendada a la DNDA.